viernes, 1 de febrero de 2013

TRICÓ 2009





D.O: Rias Baixas
Bodega: Compañía de vinos Tricó
Situación: Porto , Salvaterra do Miño (Pontevedra)
Uva: Albariño 100%
Precio Aprox: 10 Euros
Fermentación: En depósitos de Acero Inoxidable sobre sus lías.
Volumen de Alcohol: 13%
Autor: Jose Antonio Lopez


Los rigores invernales me han hecho bajar por penúltima vez la velocidad hasta el punto de dejar a ralentí este bomba de vapor que me mueve: El chucuchú de las válvulas y los pitos del pecho que se han agarrado a mi ser como un inquilino acaban de dar sentido al suspiro; los procesos víricos , los dolores de garganta y las toses son para entendernos como aquel toque de atención que te alerta de que la velocidad no es buena consejera. Mucho mejor la calma y la perspectiva.
Por eso y por otras tantas cosas que gravitan a mi alrededor , como los pajarillos que revoloteaba sobre la cabeza del gato de “Pixie & Dixie” después de un mamporrazo del Bulldog del vecino. En vez de estar confeccionando la primera playlist de este año , dejaré que el guiso se atempere y macere en sus jugos cubriendo con un paño de punto grueso la cazuela de barro que da forma a mi particular guiso musical . Al fin y al cabo todavía ando buscando por debajo de las camas , por entre los bolsillos y armarios , aquellas notas musicales que se colaron por el bolsillo de mi viejo pantalón mal pespuntado . En un intento por asegurarme que me despido del 2012 con la certeza de las tareas bien hechas.
Así que vamos a dedicar las primeras líneas de este mes de Febrero a colocar una socorrida chincheta en el Noroeste de nuestra península , esperando que florezcan los balcones que dan al Mar de nuestra geografía.

Sin pararme a pensar demasiado , he caído de repente en lo poco que hemos remontado hasta Galicia para desmitificar los vinos Celtíberos que algunos piensan que se beben solo de una manera. Incluso creo con total certeza que el resorte que me ha empujado ha escribir sobre vino una mañana soleada como la de hoy , obedezca a la inquietud que me revolotea por la cabeza , o al menos aquella que se instala en el subconsciente cuando una enfermedad que afecta a un conocido nos solivianta por dentro.
En los caminos pantanosos y pedregosos que nos encamina el destino , ente omnipresente para los más creyentes. Nos encontramos gente , al principio disimulamos y miramos para otro lado pensando que somos nosotros mismos los dueños de nuestras decisiones e intuiciones. Pero en la soledad de la noche cerrada , cuando despunta los primeros rayos de sol que se reflejan sobre la escarcha; es cuando deseamos con premura , encontrarnos con algún compañero de travesía.
Carlos es uno de ellos , y yo que soy tímido y estúpido a la hora de relatar las virtudes de la gente , siento que es la mejor manera que sé desear su pronta recuperación y su regreso a la mesa de catas: Sin su personal manera de interpretar las sensaciones en forma de gestos comedidos e impulsos exaltados , cuando se tercia. O en desnudar el alma que se encuentra oculta tras los más manidos de los adjetivos en el mundo del vino , se hallan las expresiones que surgen de la poesía , del verso y la espiritualidad.
Con él he aprendido ha descubrir ese otro mundo oculto en nuestro interior , en saborear la salinidad , la piedra... así que estas líneas y crestas sirvan para hacer más ligero este pequeño calvario y volvernos a encontrar ante una copa de vino , como si el trance hubiera sido tan solo un mal sueño para hacer borrón y cuenta nueva.




Tricó visto por delante , el reverso , a contraluz , de perfil o en vista aérea es seguramente uno de los mejores caramelos que nos han llegado de tierras Galegas este último lustro. Reconozco en mi un cierto abandono estos últimos años , después de haber probado Albariños , Godellos , Txakolinas , o Ribeiros: Vinos del norte del país con el sello propio de los bosques , de las costas escarpadas y de la bravura del Cantábrico.
Tricó rompe las molduras y las entretelas de la idea que tenemos sobre un Albariño , la esbeltez de su tostada botella vestida con los harapos del recuerdo. Su etiqueta nos cuenta una historia de niñez que tanto nos gusta a los nostálgicos de aromas a goma de borrar , de madera de lapicero y de cuadernos de sumas y restas. Aquellos recuerdos que nos reviven nuestros hijos , cuando con pasión nos cuenta su primer descubrimiento de la vida: - Prefiero mil veces un colegio de toda la vida , que un plan de estudios elitista de competitiva modernez.
José Antonio López es el pequeño de tres hermanos unidos tradicionalmente al vino , su visión sin embargo sobre la dirección que debe tomar una denominación todavía joven es intrínseco al espíritu más primario de la tierra que lo vio crecer. Sus vinos son tan transparentes , honestos y sinceros que en el reflejo de su vidriosa mirada invitan a dejarnos caer por el pozo interior de sus ancestros; allí es donde descubrimos con estupor el verdadero y complejo entramado de cavidades y galerías , que nos descubren la naturalidad de sus blancos.



Cuenta la historia familiar que fue su madre la que dibujó con una espartana sencillez el plano situacional del pueblo , cuando todavía era niña. El dibujo que describe la etiqueta y que define a Tricó como: El nombre que se le da en la aldea de Cequeliños al último hijo que llega con gran diferencia de años del que le precede cuando ya no se le espera. Es el que aprende de las experiencias de los hermanos mayores y casi siempre permanece en casa cuidando de los padres.
En su interior tenemos un elixir sedoso producto de su fermentación entre lías. Un perfume a flores blancas , a piña , lychees , azahar , Rambutan , y cáscaras de cítricos que se entremezcla con el frescor que aportan verdes prados , el musgo y la brisa primaveral proveniente de las costas. Son solo recuerdos y evocaciones que transmiten la complejidad de este blanco , pasados dos años en la botella; un dato a destacar porque son pocos los Albariños los que crecen de la manera que crece este blanco en la botella , recuerda con satisfacción a esa extraña combinación de los Rielsing Alemanes o Austriacos.
Es asombrosa la diferencia entre dos añadas tan parejas como el 2010 y el 2009 , que son las que he tenido la suerte de probar y que de echo ha sido exclusivamente por experimentar las diferencias que otros compañeros habían presentido. Realmente el vino es diferente en el mismo momento en el que lo ves precipitarse sobre la copa , y con un año más de botella su untuosidad y grasa destaca todavía más junto a esos toques se salinidad agradable que sustituyen ligeramente a la minerabilidad del 2010.

Un color de sutil pajizo que contrasta con la densidad que se aprecia al agitar el elixir en la copa; lágrima con recuerdos a miel de eucalipto y crianza , pese a no haber fermentado en barrica. El ataque en boca no defrauda , punzante y ligeramente amargo con una acidez explosiva que busca potencia en los maridajes: Quesos grasos , con mucha curación , pescado y mariscos potentes , vieiras... Ahí es cuando cobra importancia la contundencia de su lóngevidad en el retrogusto tan fantástico que deja. Herbáceo , con recuerdos a mar , a salazón , o incluso porqué no a Palo dulce y a Avellanas que se confunden al respirarlo por el paladar.
Tricó es un auténtico regalo nacido de la manera más libre posible. Sin intrusismos , abonos químicos , ni ningún tipo de manipulación que no sea la de la propia naturaleza de su tierra y la del clima caprichoso. Rompe radicalmente con los disfraces de otros blancos , y está dotado de una personalidad única teniendo en cuenta lo que puede a dar de si un blanco una vez nos hemos animado a descubrir uvas de corte Europeo (Rielsing , Gewürztraminer , Trebiano , Chenin , Garganega) , donde los sabores rompen diametralmente con el estigma que soporta el vino blanco.


Lo cierto es que tenemos un paraíso entre el vino blanco y rosado que se cultiva a lo largo y ancho de nuestro planeta , y sin embargo jamás le hemos dado la importancia que se merece. Me gustaría animaros a descubrir un rango distinto de sabores , y de paso , igual que la comida va directamente ligada al vino , como no , también la música.
Así que para este espectáculo de sensaciones que nos regala Tricó , me voy a permitir el lujo de escoger la música de acompañamiento y un disco en concreto que me hace viajar , y que en breve tendremos la suerte de disfrutar el próximo mes de Marzo en vivo: PATRICK WATSON es un joven orfebre de las tradiciones más hogareñas de la música. Él sabe del cariño que se ha de depositar en una melodía , y sus directos son como aquellas reuniones familiares en torno a la chimenea , donde surgen inesperadamente aquellas cosas que guardamos celosamente en nuestro corazón: Pequeñas historias , secretos , misterios , felicidad contenida y conexión metafísica. 
 
El suyo es uno de los discos más hermosos del año pasado por el que pasó casi de puntillas. Pero es cierto que lo fabuloso de la música , tal y como comentaba con mi amigo Txarls vía introceánica en su blog. Tiene tanto de placer confeccionarse una lista de los discos más adorados del año , como descubrir que pasadas fiestas y de lleno ya en el 2013. Si uno se detiene a tomar aliento y a entablar conversación con algún compañero extraviado de viaje , se descubren pequeños tesoros de los que disfrutar.
ADVENTURES IN YOUR OWN BACKYARD es uno de ellos , y me congratulo de aplazar con desidia el paso del tiempo. Porque los buenos momentos merecen masticarse , paladearse y exhalarse ; como las buenas amistades , aquellas que cuando no están a nuestro lado se vuelven eternas.
Queremos verte pronto masticar vino Carlos , y transmitirnos sensaciones como el Profesor Xavier a sus mutantes.




No hay comentarios:

Publicar un comentario