Se que suena
tremendamente manido e incluso falso. Pero si bien es cierto que
cuando uno se dispone a hacer una lita de sus preferencias del año;
o por lo menos en mi caso. Es inevitable la disyuntiva entre: Lo que
nos gusta por hábito o costumbre, y el criterio a la hora de decidir
al justo merecedor de la cima porque...
Si no es así
no es una lista, me parece hipócrita querer quedar bien con todos y
no mojarse, es más, me parece aburrido; que es muchísimo peor.
El
aburrimiento es el equivalente a la desgana y si hay que traducir el
aburrimiento, que sea por lo menos en algo creativo o que produzca
alguna reacción (lo mismo da que sea asco como admiración).
Si hay algo
que ha caracterizado mi 2017, a parte del estupor diario de comprobar
que el género humano parece estar más decidido a avanzar hacia lo
absurdo que a lo creador. De conformarse a que lo cuiden, lo acicalen
le hagan tan fácil la vida, como para prescindir de sus libertades
varias.
Y
musicalmente hablando y por más que se empeñen algunos en traducir
la falta de algo deslumbrante y sobresaliente sobre los demás, como
un año con poca calidad. Creo, que precisamente la equidad no
invalida la calidad e incluso demuestra que hay muchísimo donde
elegir si ya son 50 obras; más las que se han quedado fuera. Y me
encanta que mi elección final obedezca a una razón muy íntima,
personal y de necesidad personal.
Por muy
manido que suene y como algo excepcional en mi caso... Este año sí.
He de reconocer que la lista aunque no al 100%, podría invertirse en
orden y no perdería su valor. El que más me ha costado a la hora de
aplicar un orden y categoría, porque me parecen casi por igual 50
discos fabulosos que hablan un poco de mi 2017, como igual cuchichean
del vuestro. Espero que nadie piense que en ella hay alguna idea de
elegir lo mejor de este año, no. Solo es, una lista más
50:
MANUELA_MANUELA
Con un
nombre más escueto, funcional y práctico que un chándal de paño.
Nick McCarthy (guitarra de Franz Ferdinand, que ya no), y su mujer
Manuela Gernedel han hecho de la simplicidad una virtud: Bits que
flirtean con el Pop francés de los 60, incluso con muchos rasgos del
Funk, el Soul o el Jazz de manera no necesariamente obvia. Y una
estructura aparentemente endeble pero rebosante de una sensibilidad
ilimitada.
Eso sí, con
la compañía y colaboración de una tribu anónima de lo más
sorprendente y discreta.
(Lo fácil y
simple, tres veces bueno)
49:
KARLA KANE_KING DAUGHTER'S HOME FOR INCURABLES
Tirando
todavía de la madeja del aprovechamiento y buen uso de lo poco.
Karla Kane, o la que es líder de la Californiana y Poppy banda The
Corner Lauguers va ya con este su segundo álbum en solitario. Una
orientación todavía más folk que la que salpica el temario de su
banda, pero consiguiendo que lo Folk, Pop, pastoral, frágil y
sencillo se convierta en algo increíble.
Posiblemente
porque nadie como ella para realzar lo importante de verdad en una
canción: la melodía y la exquisitez sin necesidad de abusar de la
nata montada, fondant y adornos que engañan a la vista.
(Canciones
con la ligereza de un gesto)
48:
PIANO MAGIC_CLOSURE
La banda de
Glen Johnson y su variable colectivo es una de esas anomalías que
curiosamente se siguen dando en nuestra trepidante actualidad.
Capaces de detener el tiempo sin erosionarse, al contrario de otros
coetáneos (Mogwai, Tortoise.. por texturas y no estilos). Siguen
facturando discos de muy tarde en tarde, sin presión, sin
obligación; ni tan siquiera con cualquier tipo de justificante
estilístico: 25% experimentales 25% oscuros 25% elegantes 25%
enigmáticos. Pero eso sí, siempre eficientes y con un grado de
calidad que ya la quisieran la mayoría de bandas para lo
inadvertidos que han pasado en sus 20 años de carrera.
Esta no iba
a ser una excepción. Un disco que recorre varios escenarios en su
más latente discografía, pero que ensalzan por sorpresa la más
sibilina, minimalista y sinuosa.
(Puro
ingenio para que la aflicción se convierta en grandiosidad)
47:
DEAD PARTIES_ALL OUR TIMES
La banda
Barcelonesa de origen Australiano parecía habernos dado un disco de
debut de manual: Shoegaze con recuerdos a los Jesus, ese rollito más
Americano que hace que el Indie suene con otra cadencia más árida...
Pero lo que
nos ha dado es un discazo inundado de posibles singles, que renuevan
un montón de recuerdos a base inyectarlos de puro himno. Un disco
que cuanto más se escucha, más gana por calidad de producción, por
talento a la hora de darle pura energía rockera y por ojo visionario
en eso de saber clavar la melodía perfecta.
(Porque ya
nadie se atreve a hacer canciones así ¿por fácil o por miedo?)
46: METHYL ETHEL_EVERYTHING FORGOTTEN
Pese a que
este disco se haya ido desinflando con el paso del año, no a base
de escuchas, sino a base de olvido. Sigo pensando que es una pequeña
joya de Pop hecho bit. Y de canciones de apariencia ligera que se
superponen por mérito propio a su pasado más ambiental, desde un
punto de vista tan magníficamente ochentero, de Funky de hombrera y
horterismo rompepistas. Que solo por eso merece un podio
indiscutible.
(Lo que
Erasure y Level 42 acabaron haciendo petardo, estos lo hacen
maravilloso)
45:
NÚRIA GRAHAN_DOES IT RING A BELL?
Habrá quien
echará de menos en esta lista discos como el de Courtney Barnett &
Kurt Vile y ya se habrá rajado las venas; pero tampoco hay que dejar
que la sangre al rio. Habiendo discos notables como el de esta
Catalana con sangre Irlandesa que desde los 16 años lleva apuntando
originalidad y personalidad.
Su disco
bebe de esa lírica medio hablada y cantada que coge de la mano para
explicarte. Un cúmulo de razones que hace que por el simple hecho de
cantar en Inglés se le quite el mérito (supongo), o se le exija de
más.
Su disco sin
más y sin menos, es una maravilla de Pop acústico con miras mucho
más amplias. De echo podría ser muchas más cosas, las que tu
quieras y todas buenas.
(Pop sin
experimentos gaseosos y buenas canciones)
44:
DANIEL LUPPI & PARQUERT COURTS_MILANO
Un
cortometraje con aires de street movie de historias cruzadas en forma
de canciones. Porque como era de prever, cada vez que Parquets
encuentran socios o razones para salirse de su guión, brillan sobre
la media por exceso de talento, imaginación y desvergüenza.
En esta
ocasión sería como meter en la coctelera a S. Gainsburg, a Peaches,
Miss Kittin, Mancini y a Magazine. En realidad, una excusa para que
Daniele Luppi se lleve a su terreno cinematográfico y experimental a
la banda Neoyorkina. Que éstos hagan lo propio desde su lado más
histriónico, y si eran pocos... Sazonarlo con Karen O de Yeah yeah
yeahs!, que le va el rollo poco y pasaba por allí. Y montar una
orgía creativa en la cual cada uno bebe del otro.
El caso es
que si no fuera porque todo en lo que se ven envueltos estos colgados
suena a broma, no dejaríamos de creer que es una puta genialidad. De
echo lo es.
(Discos que
se llevan puestos y sin envolver)
43:
MALE GAZE_MISS TAKEN
Lo de la
banda de San Francisco es muy bruto, tanto, como andar descalzo y a
la brava por esas playas volcánicas llenas de piedras, comer higos
chumbos a pelo o dejarse caer por un tobogán de pizarra, pómez y
sílex. Porque en realidad Miss Taken pese a profundizar más en su
discurso salvaje de King Leer y hacerlo más adulto. No es tan solo
esa típica banda que parece grunge pero no, casi Postpunk a la que
si le pasaras un trapo y sacases brillo molaría más.
Porque
precisamente es ese camino que nadie quiere coger por su incómodo
itinerario. Ese montón de cosas que te confunden y te hacen pensar
porque sus canciones, como las de Hukar Dü: Tienen la rudeza del
Punk y... la poesía y fragilidad también del Punk. Porque... hay
tanto punk en todo. En el Pop, en el bailar pegados y hasta en el
misterio de la música sin manual.
(Canciones
para aprender a escuchar música sin guía)
42:
TIGER MENJA ZEBRA_ANARQUÍA I MAL DE CAP
Hay veces
que sabes cuando la música es el remedio. Y tiempos donde solo la
música puede traducir los estados de ánimo en canciones.
A los
Barceloneses Tiger Menja Zebra les tocaba estar aquí no solo por
derecho propio. Sino porque además de publicar un tercer disco
tremendo, lo hacen oportunamente cuando más necesitados estamos de
aguardiente. Porque amigos, no solo de flan con nata de bote vive el
hombre. Hay veces que sin tratarse de ser un bruto, se puede hacer,
decir y ser bruto simplemente llamando a las cosas por su nombre.
Aunque a la
hora de ponerles etiquetas no sepamos si es la electrónica, el
Hardcore, lo industrial, el Punk o el Dark Wave, lo que nos hace de
verdad bailar.
(Verdades
como puños sin pose de empollón)
41:
GRANDADDY_LAST PLACE
Es verdad
que a quien nos gusta la banda de Modesto, no sabemos bien si es por
su batería abrazable, o por la dulzura de pastor culto de su líder
Jason Lytle. Sus canciones de echo siguen una métrica tan parecida y
secular que no son pocos los que dicen que todas sus canciones son
iguales. Pero todos sabemos, o deberíamos, que hay una magia
singular y particular a la hora de venerar a la ELO y Beach Boys por
partes iguales, y no renunciar a esa especie de sonoridad marciana de
su rock.
Algo
parecido a lo que conseguían con sus química Devo o They me be
Giants, solo que con un amor más infinito y una adicción
prácticamente inexplicable.
Sin ser el
mejor disco de su carrera, es el regreso tras 11 años de silencio;
necesario. Y sin duda alguna un homenaje a su bajista recién
desaparecido y en honor a un cetro que todos sabemos se merecen. Con
un puñado de canciones, que sí, sabemos que están entre lo mejor
de su carrera.
(Volviendo a
detener el Rock con ternura y magnetismo)
40:
EXQUIRLA_PARA QUIENES AUN VIVEN
Supongo que
como a mi en su día. Habrá muchos que no puedan evitar comparar la
unión de Niño de Elche con Toundra con el ultra afamado Omega de
Morente y Lagartija Nick (aunque cuando este saliera apenas si fueron
4 los que le otorgaron la debida licencia).
De este
último disco entre lo bueno que es y lo necesario de su pequeña
revolución cultural, y también lo dados que somos a mitificar. Se
ha hecho a día de hoy algo tan tremendo, que cualquiera se atreve a
decir algo. Así que supongo que lo normal es adorar o poner a parir
“Para quienes aun Viven”.
Yo me
atrevería a decir más: cierra los ojos y desconecta. Lee las
poesías de Enrique Falcón. Seguro que así también descubrirás
otro universo ajeno al sinfín de estereotipos que le acechan. Y
verás que este disco valiente, oportuno o inoportuno, brilla
precisamente por eso; porque igual no toca pero se necesita para
revertir estas autopistas a las que no someten los prejuicios.
(Caminos sin
barreras, peajes, y muchísimos más paisajes)
39:
RON GALLO_HEAVY META
Supongo que
a sabidas cuentas de lo que se cuece en California respecto al garaje
y sus derivados. Difícil va a ser sacudirse el machaqueo cíclico
de Ty Segall y sus acólitos; supongo que es el precio que hay que
pagar por las cosas que chanan.
Por suerte
por eso, hay tipos como Ron Gallo que son un soplo de aire fresco. Y
ojo, no es que ciertas músicas tengan muchas lecturas como para
renovarlas. Pero a veces pasa que las canciones hablan porque hay un
lenguaje universal que perdura: Ese mismo por el que sigues bailando
a los Rolling o a T rex.
Heavy Meta
tiene algo de eso. Canciones tonificantes que sin apenas variar el
discurso, que giran la tortilla y mezclan la Psicodelia Glan Angelina
con algo que por ejemplo también tenían los Suede de Animal
Nitrate: Energía Vital.
La mayoría
de veces sobra con eso. Ni estilos ni momentos oportunos, solo
conexión vital; tu quieres, él te lo da.
(Glan de
voltaje Hardrock y pura electricidad)
38:
JOHNN MURRY_A SHORT HISTORY OF DECAY
Quien diría
que la tristeza y la redención ajena pudiera llevarnos a estado de
emoción tan maravilloso. El disco de este hombre no es así, el
típico que gusta por su maldita historia paralela. Sino porque es
una puta maravilla que podría fluctuar en esta lista de arriba a
abajo o a la inversa. Si no fuera porque la introspección parece a
la vista de la gente pretenciosa.
Diez
canciones de Folk abrasivo y taciturno, que se magrean con el Blues y
la pura esencia. Y que hace que su escucha acabe reluciendo en
realidad, como un disco de cantautor con espíritu de Rock
electtrificado.
(Folk para
corazones rotos con alma de Soulman Rockero)
37:
MICHAEL HEAD & THE RED ELASTIC BAND_ADIÓS SEÑOR PUSSYCAT
Pale
Fountains tan solo sacaron dos discos en el 84 y en el 85, pero desde
entonces y por su manera de traducir el Pop de toques cálidos,
acabarían por ser una banda fetiche de los adelantados al “indie”.
Pena y drama
por otro lado, sería la poca atención para las grandiosas canciones
que ha seguido escribiendo Michael Head; su líder. Primero con Shack
y hasta el presente en solitario o con la Red Elastic Band. Una
evolución junto a la de su voz con ya 57 años, hacia territorios
más Americanos y Folk, pero con la misma increíble sensibilidad.
Adiós Señor Pussycat es un disco sin aspavientos que como un
cardiograma. Grava desde lo cotidiano y real de la vida esa vertiente
del romanticismo de Love y Arthur Lee, de una manera mucho más
sosegada pero igual de intensa.
(Una pequeña
obra de arte del Pop cotidiano y real)
36:
JAPANESE BREAKFAST_SOFT SOUNDS FROM ANOTHER PLANET
Soft Sounds
of Another Planet es un veneno que entra vía intravenosa de manera
lenta y sin apenas síntomas inmediatos. Su sonido no abusa ni del
dramatismo, ni de la brillantez con la que mucha música actual
intenta llamar la atención. Sin embargo, es de esos discos que
envuelven quizás por su sencillez más que por sus excesos.
Con muchos
rasgos del Pop electrónico y ligero, pero en realidad con un alma
más propia del Folk o de los clásicos. Michelle Zauner tras su
traslado de Filadelfia a Oregon por problemas familiares, ha
conseguido su trabajo más expresivo y complejo. Una obra con entrada
sintética y ambiental, que va cobrando vida a base de una voz
inconmensurable. Y unos arreglos que entre lo elegante, lo suficiente
y lo sensual en aproximaciones hacia EBTG, el R&B e incluso sin
desdeñar la pista de baile, pero siempre con una exquisitez y
precisión que lo hace distinto al resto.
(Se puede
ser elegante, eficiente y sofisticado sin caer en lo manido)
35:
KING GIZZARD & THE LIZZARD WIZARD_fFLYING MICROTONAL BANANA
Hay veces
que la hiperactividad puede pecar de cansina y contraproducente. De
echo, el multicombo Australiano está ahí rozando el jartimiento
a base de igual pecar de exceso; algo que dicho sea de paso, odio con
toda mi alma. Como si ya no tuviera suficiente con gestionar lo que
yo considero: el tiempo hábil para disfrutar, degustar y asimilar un
disco (que es de más de un año seguro).
Pues ellos
publican cinco, ea!! Como una especie de Ed Wood donde nada se tira y
todo se maqueta. Y entre tanto disco y canción; algunos de ellos
prescindibles. Hay joyas brutas y terriblemente impulsivas, como el
disco que aquí nos traen.
Un compendio
de descargas entre la psicodelia, el rare groove a lo Johnny Pearson
y las fusiones orientales más adictivas. Nueve bombazos que no bajan
ni un segundo el acelerador totalmente enfocadas a la pista de baile,
tal y como se pensaban en los 60. Y no es que inventen nada nuevo,
pues ya hace una pila de años lo hacían infinidad de autores
anónimos con el Krautrock, el progresivo y la psicodelia. Pero se
agradece que en esta ocasión el criterio sea directo y sin ambages,
al grano vamos.
(Difícil
resistirse a su espiral, con la sugestión adecuada)
34:
SEA PINKS_WATERHOUSE
Hablamos de
Pop sin saber que por el camino hemos perdido gran parte del concepto
inicial del género. No desde un punto de vista técnico, pero si
desde el emocional y básico que creció en el tan mentado C86,
Cherry Red, Sarah Records y oros que les siguieron al rebufo.
Pues el
quinto Lp de este cuarteto de Belfast, puede que sea de esa minoría
de discos que sigue defendiendo una esencia, sin propósito alguno de
distorsión. Pop y punto. Con los argumentos de algunas de sus
mejores composiciones sin el exceso de azúcar de discos anteriores,
y con una muy buena dosis de enriquecimiento estilístico. Discos
como pocos, donde nada falla y se disfrutan de principio a fin con
una honestidad apabullante. (Por más que se quiera buscar “esa”
banda de POP, ya hace muchos años que están entre nosotros)
33:
ELBOW_LITTLE FICTION
Recuerdo
unos años, concretos, en los que bandas como DOVES y ELBOW me
enseñaron que había algo más tras el BritPop y sus terribles
secuelas.
Desde aquel
2001 la experimentación y oscuridad de esta banda de esta banda de
Manchester se ha ido transmutando en un épica, grandilocuencia y
pomposidad nada afín con mis gustos, pese a que admito, han resuelto
grandes discos. Pero es aquí, con Little Fiction donde encuentro por
fin, a un Guy Garvey pletórico y de un lirismo excepcional. Un
disco de canciones tremendas, a veces de una belleza menguante donde
brillan por la esencialidad de sus esqueletos, y sobretodo por ser
cantadas con el alma que se le pide a todo gran solista.
(Un disco
vocal y líricamente muy Morrissiano)
32:
MAX ANANYEV_THE WAY TO THE OCEAN
Seguramente
encontraras pocos discos como este en las listas codeándose con
ritmos aparentemente más contemporáneos. Indefendible igual en
términos musicales de actualidad pero ineludible si entendemos las
melodías desde los estados inanimados de nuestro alma, sensibilidad
o esa manera de escucharla imaginando paisajes.
Aún
perteneciendo más al mundo de la guitarra clásica más académica.
Este joven de San Petersburgo con un debut a sus espaldas, y este
primer disco publicado en reputado sello Preserved Sound. Roza
estados de sensibilidad armónica capaces de conectar al Mark Kozelek
de Sun Kil Moon en Admiral Fell Promises con el ambient más
expresivo y cinematográfico.
(Un
disco para sumergirse a ciegas en sus instrumentales)
31:
MORRISSEY_LOW IN HIGH SCHOOL
Es de
admirar que Morrissey haya publicado este álbum y de tal manera en
los momentos presentes de su carrera: Viniendo de un fracaso
comercial importante y cuando solo se le mienta para todo, menos por
su obra. Algo por cierto, que aunque muchos critican y pueden no
respetar. Yo por lo que a mi respecta y teniendo al Mancuniano como
una especie en vías de extinción en este mundo extremadamente
correcto de la música, adoro que el bocazas vuelva de nuevo con la
misma decisión, sus mismas letras mordaces; porque la música es también teatro y espectáculo.
Además
publicando uno de sus discos más valientes posibles, en un estado
vocal creativo magnífico, y rompiendo de alguna manera con cualquier
rastro de su pasado más popular. No es un disco cómodo donde
aprovechar su mejores bazas; las del Pop hiperbritánico de los 90, o
el más rockero de Your Arsenal o de Ringlaeder of Tormentors. Pero
me parece un trabajo que va hacia adelante sin demasiado compromiso
con su pasado más exitoso.
Y con un
buen puñado de canciones, pese a no ser de esas canciones que entran
de primeras, tan lícitas como el estigma de sus exitos pasados.
Porque... sin discutir lo bueno que fue el pasado, hay que vivir en
el presente.
(Un disco
que ganará con el tiempo)